¡Hola! Soy Paloma Masot Vaca, una chica de 19 años estudiante de Medicina y actual residente en la Residencia Universitaria de Fundación CB, RUCAB. Hoy os vengo a hablar un poco sobre mi experiencia personal a nivel deporte y universidad.

Desde pequeña siempre he practicado en el deporte de mis sueños, la hípica. Durante toda mi vida he desempeñado esta actividad junto con mi familia y amigos, por lo que me considero una persona de lo más afortunada.

Conforme fueron pasando los años cada vez era más complicado compaginar este deporte que tanta dedicación requiere con los estudios; ya que cada vez la exigencia era mayor, sin embargo; a mí lo que siempre me motivaba a continuar era poder seguir montando, por eso apliqué el lema de mis padres durante toda mi carrera como deportista y estudiante: “si te organizas, hay tiempo para todo”.

Mi vocación

Nunca he dudado de la carrera que quería estudiar, porque desde pequeña siempre he tenido vocación por la Medicina, lo que me llevaría a tener que estudiar mucho, organizarme y priorizar unas cosas antes que otras. Aun así, la gente me preguntaba, “¿cómo te da tiempo?”, “¿en serio te merece la pena estar encerrada todo el día y salir solo para trabajar con un animal?”, “deja de montar, te pierdes un montón de planes solo por montar”.

Y yo como una niña que era, muchas veces me paraba a pensar y decía ¿a lo mejor no me merece la pena?, pero SÍ.

A mí lo que me hacía más feliz durante el día era ir a la hípica y montar a mi yegua, lo que sentía era inexplicable, un sentimiento de complicidad increíble entre un animal de 500 kilogramos y una persona, sin hablar el mismo idioma y sin pensar de la misma manera, pero siempre con la sensación de que nuestras almas y nuestros corazones nos pertenecían mutuamente y que éramos ELLA Y YO.

Así que seguí hasta el final compitiendo en el Campeonato de España, y en competiciones nacionales e internacionales consiguiendo numerosas victorias. A su vez, lo compaginé con los estudios para conseguir la meta, quería estudiar la carrera de mis sueños, Medicina.

Pude obtener resultados académicos muy buenos y al mismo tiempo, el título de deportista de alto rendimiento. Lo importante de esto, es saber que con esfuerzo todo se consigue y, siempre he sido una niña normal; he salido con mis amigos, me he divertido, he montado, he ido de competición, he ido al colegio, he hecho todos los exámenes, porque como decían mis padres… «Hay tiempo para todo».

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